El borde de una herida, una muestra comisariada por Juan Guardiola, co-producción de Centrocentro Cibeles y Cdan Fundación Beulas podría ser definida como una «reflexión poética y política del viaje del migrante desde la creación contemporánea». La muestra se inauguró el 16 de febrero y permanecío abierta hasta el 4 de junio 2017, en CentroCentro, Madrid.
El diseño expositivo de OSS refuerza el discurso de la exposición y facilita el recorrido de la misma. Un sólo elemento de la intervención se hace percibir y concentra función y significado: se trata de una valla hecha con maderas y tela de invernadero, que describe un trazado ligeramente en zig-zag, situada en la sección central de la muestra. En un primer nivel, la función de la valla es la de orientar el visitante en un espacio que resulta confuso a la vez que separar una zona en penumbra en la que se presentan audiovisuales de otra con luz más intensa. Este contraste en la iluminación también hace referencia al juego dramático de ocultación y visibilidad que se sucede en las fronteras más vigiladas. Una segunda lectura desvela que esta valla guía a la vez que fuerza al visitante a recorrer un camino estrecho y controlado. Asoma amenazante e incómoda entre los muros de las salas, reduce el espacio personal del visitante y sus movimientos. Los materiales empleados refieren también a los dos sectores de la economía donde más inmigrantes suelen trabajar en España: la construcción y la agricultura de invernadero.