FCMM, vivero de industrias creativas y culturales, se realiza gracias a la adaptación de una sala de tamaño medio en Matadero Madrid. Para poder llevar a cabo la obra, cuyo programa requería entre otros, 120 puestos de trabajo más espacios de reunión y presentaciones, usamos muy pocos materiales, fáciles de instalar, e intentamos crear con ellos la mayor cantidad de áreas diferenciadas, adaptadas a distintas necesidades. Tres volúmenes cercanos a la entrada organizan el espacio, comprimiendo y plegando las circulaciones a su alrededor. Esto crea un gradiente desde lo compacto a lo expansivo, de lo agitado a lo tranquilo, que permite proporcionar una cierta variedad, adaptabilidad y flexibilidad a los ambientes de trabajo. En poco más de un mes se construyó un proyecto reversible, ‘envasado al vacío’ en su precisión, adaptable a las distintas necesidades del cliente, por una cantidad, inferior a los 105 euros por metro cuadrado, que permitió que el proyecto acabase llevándose a cabo.